domingo, 28 de diciembre de 2014

Manuela Sáenz

Manuela Sáenz

De Wikipedia, la enciclopedia libre
Manuela Sáenz Aizpuru
Manuela Sáenz.jpg
Manuela Sáenz, portando la insignia de la Orden El Sol del Perú.
NombreManuela Sáenz Aizpuru
Nacimiento27 de diciembre de 1797
Bandera de España Quito, Virreinato de Nueva Granada
Fallecimiento23 de noviembre de 1856 (58 años)
Bandera del Perú Paita, Perú
Causa de muerteDifteria
NacionalidadEcuatoriana
CónyugeJames Thorne
PadresMaría Joaquina de Aizpuru
Simón Sáenz Vergara
[editar datos en Wikidata]
Manuela Sáenz Aizpuru (Quito, Virreinato de Nueva Granada, 27 de diciembre de 1797 - Paita, Perú, 23 de noviembre de 1856) fue una patriota quiteña y compañera sentimental de Simón Bolívar, reconocida por la historiografía independentista hispanoamericana contemporánea como heroína de la Independencia de América del Sur. Es conocida también como Manuelita Sáenz y como «Libertadora del Libertador» por su decidida actuación defendiendo a Simón Bolívar durante un atentado en su contra.
Criticada, denigrada e ignorada y desterrada por sus contemporáneos y aún décadas después de su muerte, sólo a mediados del siglo XX Manuela Sáenz empezó a ser reivindicada como heroína y prócer en la gesta de la independencia o como precursora del feminismo en América Latina.[1] Casi dos siglos después de su muerte, es un personaje que continúa aún despertando odios o amores y ocasionando debates y controversias.[2]


Biografía[editar]

Niñez y adolescencia[editar]

Retrato de Manuelita Sáenz, por José María Epinosa. Acuarela sobre marfil, alrededor de 1828
Hija del hidalgo español Simón Sáenz Vergara y de la criolla María Joaquina de Aizpuru, nació en Quito el 27 de diciembre de 1797, aunque algunas fuentes citan el año de 1795. Su madre —que había sido enviada a la hacienda Cataguango, propiedad de los Aizpuru, a dar a luz, murió, según unas versiones, al día que nació Manuela o, según otras, dos años más tarde, por lo cual Manuelita fue entregada al Convento de las Monjas Conceptas (Real Monasterio de la Limpia e Inmaculada Concepción), en el que pasó sus primeros años bajo la tutela de su superiora, sor Buenaventura.
Se sabe que por sus talentos y dones especiales su padre la llevó de visita a la casa que compartía con su esposa, Juana del Campo y Larraondo, ilustre dama nacida en Popayán, quien siempre trató a la niña con cariño y le enseñó buenas costumbres, fomentó su interés por la lectura y le prodigó afectuosos cuidados de madre. En esa casa nació un profundo lazo de amor con su hermano de padre, José María Sáenz. A las negras Natán y Jonatás las conoció en los primeros años de su vida, cuando salía del internado para pasar unos días en Cataguango, por lo que les unió una amistad que se inició en la niñez y fueron sus inseparables amigas y compañeras.
Luego de haber completado su formación con las monjas conceptas, pasó al monasterio de Santa Catalina de Siena (Quito), de la Orden de Santo Domingo, para concluir así con la educación que en ese tiempo se impartía a las señoritas de las más importantes familias de la ciudad. En ese lugar, aprendió a bordar, a elaborar dulces y a comunicarse en inglés y francés, habilidades y labores que fueron con las que se mantendría en sus años de exilio en Paita (Perú).
A los 17 años, huyó del convento, en un episodio del que se sabe pocos detalles y del cual ella no hablaba, pues al parecer fue seducida y luego abandonada por Fausto D’Elhuyar, oficial del Ejército Real, sobrino de Juan José Elhúyar e hijo de Fausto Elhúyar (los descubridores del tungsteno).

Matrimonio y conspiración libertadora[editar]

En diciembre de 1816, Manuela, a la edad de 19 años, conoció en Quito a James Thorne, acaudalado médico inglés veintiséis años mayor que ella, y Simón Sáenz, su padre, como era costumbre en la época y por razones de conveniencia, pactó su boda para julio de 1817. La boda se celebró en Lima, entonces capital del Virreinato del Perú, ciudad que no conocía las condiciones «ilegítimas» de su nacimiento, por lo cual Manuelita fue aceptada en el ambiente aristocrático de la ciudad virreinal como ya había sucedido con Rosa Campuzano, la guayaquileña con quien Manuela hizo gran amistad y se involucró de lleno en actividades políticas, en una evidente atmósfera de descontento con las autoridades españolas, en la cual las mujeres ejercían una gran influencia en los círculos virreinales para conseguir empleos a sus padres, esposo e hijos, por lo que estaban informadas de los acontecimientos en el virreinato, siendo esta una de las razones que explican la decidida participación femenina en los movimientos revolucionarios, apoyando la causa de Bolívar por liberar la Nueva Granada y de San Martín por independizar el Perú. En este ambiente, Manuela contribuyó decididamente en el cambio del Batallón Numancia, del cual formaba parte su hermano José María, hacia las filas patriotas.
Por sus actividades pro independentistas, San Martín, luego de haber tomado Lima con sus milicianos y proclamado su independencia el 28 de julio de 1821, le concedió a Manuela el título de Caballeresa de la Orden El Sol del Perú.
En 1821, a raíz de la muerte de su tía materna, Manuela decidió regresar al Ecuador, para reclamar su parte de la herencia de su abuelo materno, y viajó con su medio hermano, entonces oficial del batallón Numancia, ya integrado al ejército libertador con el nombre de Voltígeros de la Guardia y bajo las órdenes del general Antonio José de Sucre, que había recibido la orden de trasladarse a Quito.

Encuentro con Bolívar[editar]

Durante la entrada triunfal de Simón Bolívar a Quito, el 16 de junio de 1822, Manuela Sáenz de Thorne lo ve por primera vez, en un evento narrado por ella en su diario de Quito:
Cuando se acercaba al paso de nuestro balcón, tomé la corona de rosas y ramitas de laureles y la arrojé para que cayera al frente del caballo de S. E.; pero con tal suerte que fue a parar con toda la fuerza de la caída, a la casaca, justo en el pecho de S. E. Me ruboricé de la vergüenza, pues el Libertador alzó su mirada y me descubrió aún con los brazos estirados en tal acto; pero S. E. se sonrió y me hizo un saludo con el sombrero pavonado que traía a la mano.
Manuela Sáenz.
En un encuentro posterior, en el baile de bienvenida al Libertador, él le manifiesta: «Señora: si mis soldados tuvieran su puntería, ya habríamos ganado la guerra a España». Manuela y Simón Bolívar se convirtieron en amantes y compañeros de lucha durante ocho años, hasta la muerte de éste en 1830.

Los años turbulentos[editar]

Retrato de Manuela Sáenz.
En 1823 Manuelita acompañó a Bolívar al Perú y estuvo a su lado durante buena parte de las campañas, participando en ellas activamente, hasta culminar la gesta libertadora cuando se radicaron en la ciudad de Santa Fé de Bogotá.
Thorne en varias ocasiones pidió a Manuela que volviera a su lado. La respuesta de Manuela fue contundente: seguiría con Bolívar y daba por finalizado su matrimonio con el inglés. En alguna ocasión, consultada sobre el rompimiento con su marido, Manuelita expresó que no podía amar a un hombre que reía sin reír, que respiraba pero no vivía y que le generaba las más agrias repulsiones. Este comportamiento "indecente" para una mujer de la época marcó un antecedente de autodeterminismo en la mujer en una época donde eran reprimidas por una sociedad que las anulaba completamente; en este acto esta quizás una de las características más interesantes de este personaje histórico.

La libertadora del libertador[editar]

Durante su estancia en Santa Fé de Bogotá, el 25 de septiembre de 1828, Bolívar fue objeto de un intento de asesinato, frustrado gracias a la valiente intervención de Manuelita. Los enemigos de Bolívar habían conjurado para darle muerte aquella noche de septiembre. Al entrar al Palacio de San Carlos (hoy día sede de la Cancillería de Colombia), frente al Teatro Colón, Manuela se da cuenta del atentado, y se interpone a los rebeldes, con el fin de que Bolívar tuviera tiempo de escapar por la ventana. En conmemoración de estos hechos en esta casa se colocó una placa con las siguientes palabras:
"SISTE PARUMPER SPECTATOR GRADUM / SI VACAS MIRATORUS VIAM SALUTIS
QUA SESE LIBERAVIT / PATER SALVATORE PATRIAE / SIMON BOLIVAR / IN NEFANDA NOCTE SEPTEMBRINA
AN MDCCCXXVIII"[3]
"DETENTE, ESPECTADOR, UN MOMENTO / Y MIRA EL LUGAR POR DONDE SE SALVÓ / EL PADRE Y
LIBERTADOR DE LA PATRIA / SIMÓN BOLÍVAR / EN LA NEFANDA NOCHE SEPTEMBRINA
1828"
Por estas acciones, Bolívar mismo la llamó la Libertadora del Libertador.

Exilio y muerte[editar]

Después de que fuera aceptada su dimisión a la presidencia, Bolívar abandonó la capital el 8 de mayo de 1830 y falleció en diciembre en la ciudad de Santa Marta producto de la tuberculosis, sumiendo a Manuela en la desesperación. En 1834, el gobierno de Francisco de Paula Santander destierra a Manuela de Colombia y ella parte hacia el exilio en la isla de Jamaica. Regresa a Ecuador en 1835, pero no alcanza a llegar a Quito: cuando se encontraba en Guaranda, su pasaporte fue revocado por el presidente Vicente Rocafuerte, por lo que decidió instalarse en el puerto de Paita, al norte del Perú.[1] Allí fue visitada por varios ilustres personajes, como el patriota italiano Giuseppe Garibaldi, el escritor peruano Ricardo Palma (que se basó en sus relatos para redactar parte de sus Tradiciones peruanas) o el venezolano Simón Rodríguez. Durante los siguientes 25 años se dedicó a la venta de tabaco, además de traducir y escribir cartas a los Estados Unidos de parte de los balleneros que pasaban por la zona, de hacer bordados y dulces por encargo.
En 1847, su esposo murió asesinado, siendo incapaz de cobrar ni siquiera los 8000 pesos de la dote entregada por su padre al momento de su matrimonio.
Manuela falleció el 23 de noviembre de 1856, a los 59 años de edad, durante una epidemia de difteria que azotó la región.[4] Su cuerpo fue sepultado en una fosa común del cementerio local y todas sus posesiones, para evitar el contagio, fueron incineradas, incluidas una parte importante de las cartas de amor de Bolívar y documentos de la Gran Colombia que aún mantenía bajo su custodia. Manuela entregó a O’Leary gran parte de documentos para elaborar la voluminosa biografía sobre Bolívar, de quien Manuela dijo: «Vivo adoré a Bolívar, muerto lo venero».

Valoración histórica[editar]

Manuela Sáenz es sin duda uno de los personajes más interesantes de las guerras de independencia de América del Sur. Según sus detractores, su relación con Simón Bolívar opaca sus propios méritos personales, como una de las grandes defensoras de la independencia de los países sudamericanos y como una de las más destacadas y avanzadas defensoras de los derechos de la mujer.[5]
En su tiempo fue severamente criticada por algunos de sus contemporáneos debido a su actitud extrovertida y provocadora para la época, así como por la influencia política que llegó a ejercer, llegando a ser incluso desterrada. Aún muchas décadas después de su muerte, influyentes intelectuales e historiadores omitieron su vida en sus obras sobre la historia de la campaña libertadora, así como otros la limitaron a una condición decorativa romántica y aun denigrante, tejiendo una leyenda sexual alrededor de su figura, la que sigue teniendo peso en la actualidad.
Solo en la mitad del siglo XX, gracias al revisionismo histórico, aparecieron biografías y ensayos en los que se empezó a reivindicar su papel como líder en la gesta libertadora de lo que hoy son Colombia, Ecuador y Perú.[1] En los últimos años Sáenz ha sido convertida en un icono del feminismo latinoamericano e igual como sigue teniendo detractores su vida también es exaltada por escritores e historiadores respetables como Alfonso Rumazo González, Germán Arciniegas o Alberto Miramón y Pablo Neruda[6] [7]

Homenaje en Argentina[editar]

En mayo de 2010, durante una visita oficial, el presidente ecuatoriano Rafael Correa develó en Buenos Aires un busto de bronce donado por su gobierno, que fue emplazado en la plazoleta ubicada en las intersección de las calles Manuela Sáenz y Juana Manso, extremo norte del parque Mujeres Argentinas en el sector de Puerto Madero.[8]

Homenaje en Colombia[editar]

En Bogotá existe el museo "La Casa de Manuelita Saenz" ubicado en la casa que esta dama habitó de 1828 a 1830, hasta después de la muerte del Libertador cuando es obligada a abandonarla. Situada en en la Plazuela de San Carlos (actualmente la Plazuela Rufino José Cuervo), en La Candelaria, barrio histórico de Bogotá. Integrado con el Museo de Trajes Regionales, este museo le abre particularmente un espacio al estilo y vestuario de Manuelita.[9]
En el sur de Bogotá, en la ciudad de Cali y en el municio de Dosquebradas (Risaralda), existen colegios o establecimientos educativos que llevan el nombre de Manuelita Saenz[10]
En el 2010 la alcaldía mayor de Bogotá, en el marco de la celebración del bicentenario de la independencia de Colombia, programó un homenaje a Manuelita Saenz con actos que incluyeron la lectura de sus cartas, a cargo de actrices colombianas, el jueves 8 de julio frente al Palacio de San Carlos, y un acto de despedida en la Quinta de Bolivar el viernes 9 de julio de la caravana proveniente de Ecuador que llevaba restos simbólicos de Manuelita a Venezuela.[11]

Homenajes en Ecuador[editar]

Stamps of Ecuador, 2010-15.jpg
En el barrio San Marcos, sector del Centro Histórico de Quito, existe un museo dedicado a su memoria, creado en 1994.[12]
En la capital ecuatoriana también hay un pequeño busto suyo en el parque de La Alameda; una calle lleva su nombre, así como una de las 8 administraciones zonales, concretamente la de Zona Centro; además, en 2010, durante la ceremonia de conmemoración por los 188 años de la Batalla de Pichincha, fue develado otro busto en el Salón de Armas del Templo de la Patria.[13]
Manuela Sáenz combatió en la Batalla de Pichincha a su regreso del Perú y recibió el grado de teniente de húsares del Ejército Libertador. Posteriormente combatió en la de Ayacucho bajo las órdenes del mariscal Antonio José de Sucre, quien le sugirió a Bolívar su ascenso a coronela, rango que le fue concedido. El 22 de mayo de 2007, en el marco de la conmemoración de la Batalla de Pichincha el presidente ecuatoriano Rafael Correa le concedió a Manuela Sáenz el grado de generala de honor de la República de Ecuador.[14]

Homenaje en Venezuela[editar]

El 5 de julio de 2010, en el marco de la conmemoración del 199.° aniversario de la firma del Acta de Independencia de Venezuela, llegó al Panteón Nacional un cofre que contenía tierra de la localidad peruana de Paita, donde fue enterrada Manuela Sáenz. Estos restos simbólicos fueron trasladados por tierra atravesando Perú, Ecuador, Colombia y Venezuela hasta arribar a Caracas, donde reposan en un sarcófago diseñado para tal fin junto al Altar Principal en el que yacen los restos de Simón Bolívar. Además, a Sáenz se le concedió póstumamente el ascenso a generala de división del Ejército Nacional Bolivariano por su participación en la guerra independentista, en un acto que contó con la presencia de los presidentes de Ecuador y Venezuela.[15]
En 2013 el gobierno de Venezuela inauguró un monumento a Manuela Sáenz denominado Rosa Roja de Paita una escultura de 14 metros ubicada justo al lado del Mausoleo de Simón Bolívar en Caracas.[16]

En el arte[editar]

Manuelita ha sido uno de los personajes más retratados de la Independencia; desde finales del siglo XX se han escrito varios libros sobre ella, y su vida ha sido llevada al cine en el año 2001 e inspirado series y folletines para la televisión.

Libros[editar]

  • Carlos Hugo Molina Saucedo. "Manuela, mi amable loca", Editorial La Hoguera
  • Victor Wolfgang von Hagen. Las cuatro estaciones de Manuela, biografía, Editorial Hermes, 1953
  • Alberto Miramón. La vida ardiente de Manuelita Sáenz, biografía, Bogotá: Librería Sudamérica, 1946
  • Pablo Neruda. La insepulta de Paita: elegía dedicada a la memoria de Manuela Sáenz, amante de Simón Bolívar (con grabados en madera de Luis Seoane). Buenos Aires: Losada, 1962
  • Alfonso Rumazo González. Manuela Sáenz. La Libertadora del Libertador, biografía, Quito: Almendros y Nieto, 1984
  • Denzil Romero. La esposa del Dr. Thorne, novela erótica, premio de la X Convocatoria La Sonrisa Vertical. España: Tusquets, 1987
  • Gabriel García Márquez. El general en su laberinto, novela sobre los últimos días de Bolívar, en la que Manuela Sáenz es uno de los personajes principales, 1989
  • Luis Zúñiga. Manuela, novela, Quito: Abrapalabra Editores, 1991
  • María Mogollón y Ximena Narváez. Manuela Sáenz: presencia y polémica en la historia. Quito: Corporación Nacional Editorial, 1997
  • Gregory Kauffman. Manuela (en inglés). Seattle (EE.UU.): RLN & Company, 1999; ISBN 0-9704250-0-7
  • Tania Roura. Manuela Sáenz. Una historia maldicha, novela, Quito: La Iguana Bohemia, 2004
  • Jaime Manrique. Nuestras vidas son los ríos (Our Lives are the Rivers). Editora Club Rayo, 2007
  • Aleyda Quevedo Rojas. Dos encendidos, Secretaría de Cultura del Distrito Metropolitano de Quito, 2010

Teatro[editar]

  • "Manuela Sáenz", obra de Luis Peraza, Caracas (Venezuela), 1960
  • "Manuela Sáenz: Vine a decirlo todo", obra escrita por Vinicio Romero Martínez y estrenada en Caracas (Venezuela) en el 2007.
  • “Manuela no viene esta noche”, obra de Patricia Ariza estrenada en el 2011 en Bogotá.
  • “Las tardes de Manuela”, obra de José Manuel Freidel, estrenada en Medellín en 1989.
  • “Bolívar y Manuela: los pasos de la nostalgia” de Sebastián Ospina basado en la novela "La agonía erótica" de Víctor Paz Otero. estrenada en Bogotá, 2010.
  • "Una loca estrella". obra de Pedro Saad H, Quito, 2003.
  • "El amor de la coronela" escrita por Isabel Campos, estrenada en Bogotá, 2006.
  • “Manuela… sus propias palabras”, lectura dramatizada de fragmentos de cartas y del diario de Manuela Sáenz, presentada en Caracas en el 2012.
  • "Manuela Libertad", obra de Annie Rosenfeld, estrenada en Cuenca (Ecuador) en el 2012.

Cine[editar]

Televisión[editar]

Ópera[editar]

Referencias[editar]

  1. Saltar a: a b c Consuelo Navarro. Manuela Sáenz en el imaginario contemporáneo de Ecuador, portal Ecuador, Mi País, archivo de 2007; acceso 07.08.2011
  2. Volver arriba Historiador Guillermo Morón deshonra memoria histórica de Manuela Sáenz
  3. Volver arriba "Biblioteca de Bogotá - Narraciones acerca del Palacio Presidencial", por Eduardo Posada. Sitio web de Villegas Editores"
  4. Volver arriba Miramón, Alberto. La vida ardiente de Manuelita Sáenz. Volumen 68 de Biblioteca colombiana de cultura: Colección popular. Volumen 68 de Biblioteca colombiana de cultura / Colección popular. Instituto Colombiano de Cultura, 1973
  5. Volver arriba Taxin, Amy. La participación de la mujer en la independencia: El caso de Manuela Saez. Procesos, Revista Ecuatoriana de Historia, No. 14. 1999. Corporación Editora Nacional.
  6. Volver arriba Neruda, Pablo; Arturo Valero Martínez, Carlos Calderón Chico (1988). En defensa de Manuela Sáenz: La libertadora del Libertador. Editorial Pacífico. pp. 216 páginas.
  7. Volver arriba Cruz, Luz Marina (2005). El desmadre imaginativo de Denzil Romero. Caracas: Ministerio de Cultura de Venezuela Ediciones El Perro y la Rana. pp. 79 páginas. ISBN 9789803761264.
  8. Volver arriba Homenaje a Manuela Sáenz, portal Nuevo Madero, 10 de junio de 2010
  9. Volver arriba Museos & Exposiciones en Bogotá.
  10. Volver arriba Colegio Manuelita Saenz
  11. Volver arriba Alcaldía Mayor de Bogotá rinde homenaje a Manuelita Sáenz
  12. Volver arriba Un museo recoge la historia de Manuela Sáenz. El Comercio, 28/02/2011
  13. Volver arriba Un busto de Manuela Sáenz fue develado. El Comercio, 25/05/2010
  14. Volver arriba Homenaje para Manuela Sáenz, El Universo, 21 de mayo del 2007; consultado el 10 de marzo de 2011
  15. Volver arriba Manuelita Sáenz, camino a un simbólico reencuentro con Simón Bolívar, EFE, Caracas, 3 julio. Consultado el 4 de julio de 2010
  16. Volver arriba http://bitacora.ivic.gob.ve/?p=7679&upm_export=pdf

Enlaces externos[editar]


BAJADO DE http://es.wikipedia.org/wiki/Manuela_S%C3%A1enz

Templo del Sol Machu Picchu

Los rayos de sol del atardecer acarician #Machupicchu mientras los últimos turistas abandonan la ciudadela que queda en una adorable calma hasta el próximo día. En la parte superior de la fotografía se puede ver el Templo del Sol, uno de los lugares centrales y paso obligado en todos los recorridos por este maravilloso lugar.
Vive Machu Picchu, visita www.portalmachupicchu.com
#Cusco#Peru 
 

sábado, 13 de diciembre de 2014

domingo, 23 de noviembre de 2014

DENUNCIA DE DIARIO PERU 21: DAÑOS EN HUACA DEL SOL Y DE LA LUNA

Aseguran que letreros del Ministerio de Cultura “son letra muerta”, pues ya se afectaron cinco hectáreas.

Alerta. Zona arqueológica sufre daño irreversible. (Víctor Corcuera)
Alerta. Zona arqueológica sufre daño irreversible. (Víctor Corcuera)

Las investigaciones en la Huaca del Sol y la Luna son perjudicadas por el daño irreversible que causan los invasores en el complejo arqueológico Cerro Arena, en Trujillo.
El representante de la Asociación Peruana de Arte Rupestre (APAR), Víctor Corcuera, denunció que los letreros del Ministerio de Cultura que alertan de la intangibilidad de la zona “son letra muerta”.
Según dijo, cinco hectáreas del complejo arqueológico –con referentes de planificación urbana, áreas de cultivo y patrones funerarios de la cultura Moche– han sido destruidas por un cargador frontal.
La titular de la Dirección Desconcentrada de Cultura de La Libertad, María Córdova, dijo que hace lo posible por proteger el patrimonio.
El catedrático Carlos Bocanegra, de otro lado, lamentó el “silencio cómplice” de las autoridades porque no se pronuncian sobre la alerta de que Trujillo y Chan Chan se convertirían en un pantano por un eventual aumento de la napa freática (acumulación de agua subterránea) cuando se ejecute la tercera etapa del proyecto Chavimochic.
DATOS
  • Perú21 intentó comunicarse con el director del Proyecto Huaca del Sol y la Luna, Santiago Uceda, pero se negó a declarar.
  • Hace dos semanas, APAR denunció la invasión de 32 km en la Quebrada Santo Domingo, en Trujillo.
BAJADO DE http://peru21.pe/actualidad/libertad-invasiones-afectan-investigaciones-huaca-sol-y-luna-2204754

¿CASTAS O RAZAS? EVENTO EN LA PUCP 04/12/2014



El Jueves 4 de diciembre la Dra. Alejandra Araya ofrecerá la conferencia ¿Castas o razas? Imaginario sociopolítico y cuerpos mezclados en la América colonial. Una propuesta desde los cuadros de castas. Será en el Aula 311 Pabellón H del Campus PUCP, 5 pm. Los que no pertenecen a la Comunidad PUCP enviar datos personales (nombre completo y DNI) a jcosamalon@pucp.edu.pe hasta el jueves al mediodía para gestionar el ingreso (cupos limitados) La Dra Araya es especialista en el tema de identidades etnicas, cuerpo y control, cuenta con numerosas publicaciones y el libro Ociosos, vagabundos y malentretenidos en Chile colonial, Centro de Investigaciones Barros Arana/DIBAM, Santiago, 1999.En línea: http://www.memoriachilena.cl/602/w3-article-8424.html

viernes, 7 de noviembre de 2014

CONFERENCIA “HISTORIA DE JESÚS MARÍA Y LOS PRIMEROS RESIDENTES JAPONESES DEL DISTRITO”

CONFERENCIA
HISTORIA DE JESÚS MARÍA Y LOS PRIMEROS RESIDENTES JAPONESES DEL DISTRITO”
Expositores: Lic. Richard Chuhue Huamán y Lic. Sandro Covarrubias Llerena
Universidad Nacional Mayor de San Marcos
Miércoles 12 de noviembre de 2014 – 7 pm.
Centro Cultural Peruano Japonés
Auditorio Jinnai
El Grupo de Estudio e Investigación “Presencia de los Japoneses en el Perú. Siglos XVII- XX”, del Instituto Riva-Agüero invita a participar de la conferencia: “Historia de Jesús María y los primeros residentes japoneses del distrito”, que ofrecerán los historiadores Richard Chuhue y Sandro Covarrubias Llerena, el miércoles 12 de noviembre a las 7:00 p.m. en el Auditorio Jinnai, del Centro Cultural Peruano Japonés (Av. Gregorio Escobedo 803, Jesús María).
El distrito de Jesús María ha cumplido 50 años de fundación política. Sin embargo su conformación y habilitación como espacio residencial se inicia con el impulso que da el gobierno de Augusto B. Leguía a la expansión de las nuevas habilitaciones urbanas asociadas a la Avenida Arequipa, inaugurada en 1921. Calles y avenidas que empiezan a ser características de Jesús María como Garzón, Mariátegui, Salaverry, Arenales u otras que cambiaron sus nombres como Centenario, Tarapacá, Hipódromo, etc, comenzaron a recibir a japoneses que desde dichos años empezaron a habilitar negocios y desarrollar diversos oficios.
Es de destacar también que Jesús María albergó a la Escuela japonesa “Lima Nikko” (hoy GUE Teresa González de Fanning) lo cual contribuyo a que muchos más japoneses poblaran el distrito.
La exposición se centrara en darle rostro y descripción a estos vecinos fundadores a partir del análisis del registro de inmigrantes de Lima de 1919-1930 y también de los fondos documentales del Archivo Histórico de la Municipalidad de Lima. Previamente se hará una descripción histórica del espacio que ocupa actualmente el distrito incluyendo su pasado prehispánico y las haciendas coloniales.
El Grupo de Estudio e Investigación “Presencia de los Japoneses en el Perú. Siglos XVII- XX”,, agradece su asistencia. Mayores informes al 6266600 anexo 6601-6602, o a los correos electrónicos ira@pucp.edu.pe y dira@pucp.edu.pe . Visite nuestra página web e infórmese.

Ingreso libre, capacidad limitada
Sobre los expositores:
Richard Chuhue Huamán, es historiador con estudios de Maestría en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Ha sido editor de “Historia de Lima. Actas del XVII Coloquio de Historia de Lima” (compilador conjuntamente con Miguel Maticorena, Carlos del Águila y Antonio Coello) editado por el Centro Cultural de la UNMSM en el año 2010, “Arqueología, Historia y Sociedad de la Inmigración China al Perú” (compilado conjuntamente con Jessica Li y Antonio Coello), publicado por el Instituto Confucio de la Universidad Ricardo Palma en el año 2012 y “Lima Subterránea” (compilado conjuntamente con Pieter van Dalen) publicado por el Fondo Editorial UNMSM, 2014. Colaborador en la Revista del Archivo General de la Nación; ARKINKA, Revista de Arquitectura, Diseño y Construcción; y de la Revista Variedades del Diario El Peruano. Miembro del Comité Peruano de Ciencias Históricas afiliado al Comité Internacional (CSIH) y de la Society for Historical Archaeology (USA), forma también parte de la Oficina Cultural de la Asociación Peruano China.
Sandro Covarrubias Llerena, es historiador por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Desde hace 10 años está a cargo de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Municipalidad Metropolitana de Lima, donde ha realizado un trabajo de reorganización documental y publicado la “Guía del Archivo Histórico de la Municipalidad de Lima”.


Instituto Riva-Agüero
Pontificia Universidad Católica del Perú
G Jr. Camaná 459 - Lima 1
' 626-6600 y 626-6602
6 Fax: 626-6618
dira@pucp.edu.pe; ira@pucp.edu.pe

sábado, 18 de octubre de 2014

Este año ya van 15 casonas que se incendian en Lima



En lo que va del año, 15 inmuebles con valor histórico o cultural han sido afectados por incendios, informa el jefe departamental de Lima del Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Perú, Mario Casaretto.
Según el vocero, en la mayoría de los casos, los siniestros se desarrollaron en Lima Cercado con consecuencias lamentables para las estructuras, debido al material con el que estaban fabricadas. "La quincha, el adobe y la madera son materiales altamente inflamables. Además al mezclarse estos con el agua se convierten en lodo. Por ese motivo, se desarman fácilmente", explica el jefe de los bomberos.
Así como la casona ubicada en la Plaza Dos de Mayo, en julio último se incendió un predio con las mismas características en la tercera cuadra de la Av. Paseo Colón. El fuego destruyó parte del local de un centro de belleza y de modas. El segundo piso del predio se derrumbó.

BAJADO DE http://www.larepublica.pe/18-10-2014/este-ano-ya-van-15-casonas-que-se-incendian-en-lima

martes, 23 de septiembre de 2014

Tinta con significado: la historia ancestral de los tatuajes

Por Jake Wallis Simons, para CNN
(CNN) – Hace ocho mil años, un delgado bigote fue tatuado en el labio superior de un joven peruano. Desde entonces, su cuerpo momificado se ha convertido en el ejemplo del arte del tatuaje más antiguo sobre el planeta.
Por comparación, es evidente que el mundo de hoy es casi irreconocible. Pero según el profesor Nicholas Thomas, director del Museo de Arqueología y Antropología de la Universidad de Cambridge, autor de un nuevo libro acerca del arte del cuerpo, el tatuaje ha tenido un regreso impactante.
Si estás viendo esta nota en tu móvil, mira aquí la galería.
"Ha habido un extraordinario cambio de época en los últimos 25 años", explica. "Cuando era un niño en la década de los años sesenta, no veíamos tatuajes en todas partes. Pero ha habido una explosión de popularidad, lo que nos dice mucho acerca de quiénes somos, a nivel cultural y como individuos".
De hecho, según algunos estudios, hasta un 38 por ciento de los adultos estadounidenses y una quinta parte de los británicos tienen algún tipo de arte corporal a largo plazo.
Muchos factores vinculantes tienen influencia en la popularidad de los tatuajes. La más importante entre ellos es un cambio en la concepción popular del cuerpo.
"Debido al avance de la tecnología y la ciencia médica, las personas ya no ven al cuerpo como algo natural con lo que naces y tienes que vivir. En lugar de ello, lo percibimos mucho más como algo que es cambiante y mutable", dice el profesor Thomas.
"La gente se somete a todo tipo de intervenciones quirúrgicas, médicas y cosméticas. Incluso es posible cambiar tu género. Esto significa que ahora vemos nuestro cuerpo como algo que tenemos la responsabilidad de diseñar y hacer. Incluso algo tan simple como una rutina de ejercicios o un bronceado indica esta actitud".
Un sello permanente de la identidad
Además, como la movilidad global conlleva a la creciente pluralización de la sociedad, la identidad también está siendo vista como algo que debe ser diseñado y no heredado.
"La gente ya no es simplemente británica o australiana o californiana", dice. "Nuestras identidades son mucho más particulares, vinculadas a nuestros intereses, afines a las tradiciones culturales o espirituales, los gustos en la música y las lealtades subculturales. El tatuaje se ha convertido en un vehículo para ese tipo de identificación particular".
El auge reciente del tatuaje en cuanto a su popularidad comenzó en el ámbito contra-cultural de California de los años sesenta y setenta. Durante el siglo XX, los tatuajes se habían asociado con los delincuentes, los marineros y miembros de las fuerzas armadas, quienes se habían convertido en desplazados de la sociedad en general y querían estampar un motivo de conmemoración de sus experiencias en sus cuerpos.
Los californianos tomaron esa tendencia y la socavaron, inventando sus propios diseños y consideraron la tinta sobre el cuerpo como una forma de arte, en lugar de un tipo de marca social.
Más recientemente, ha habido un regreso a las formas tradicionales de tatuajes tribales. Los diseños celtas antiguos, o los originarios de las Islas del Pacífico, ofrecen inspiración para un gran número de entusiastas que se tatúan el cuerpo (aunque sigue siendo raro ver a un hombre joven con un tatuaje de un bigote delgado).
Sin embargo, en el pasado los tatuajes no se utilizaban para formar identidades individuales. En su lugar, tendían a ser un proyecto cultural colectivo, que constituían marcadores sociales particulares. A veces, creaban una apariencia espectacular cuando en una tribu todos compartían el mismo diseño; en otros casos, fueron utilizados como ritos de iniciación o que marcaban el hecho de haber llegado a la mayoría de edad.
"En Samoa, los hombres tienen tatuajes elaborados con tinta en los muslos, las nalgas y la parte inferior del pecho", dice el profesor Thomas. "Es una intervención dolorosa que requiere que un hombre se sujete a la autoridad de sus mayores. Cuando emerge, se le celebra como a un héroe".
Tatuajes e individualismo
Los samoanos y muchas otras comunidades tradicionales, vieron el tener tatuajes como un proceso importante en lugar de una propiedad. El cuerpo entero era tatuado a la vez, y rara vez se complementaba. Por el contrario, los entusiastas de los tatuajes modernos tienden a verlos como una colección que crece y crea marcadores permanentes de momentos importantes en la vida de un individuo.
"La globalización nos expone a una amplia gama de tradiciones de muchos lugares", dice el Profesor Thomas. "El arte corporal se está volviendo lo opuesto al conformismo, un tipo de insignia de viaje, de internacionalismo. Las personas visitan los lugares y los hacen parte de ellos mismos, así que ellos por siempre llevarán esas marcas de su visita única".
Tal como Jonny Depp dijera en alguna oportunidad, "Mi cuerpo es mi diario y mis tatuajes son mi historia". Pero, ¿indica esto una ansiedad cultural subyacente? ¿Literalmente nos estamos sintiendo menos cómodos con nuestra propia piel?
"En parte es eso", dice el profesor Thomas. "Conforme el mundo se abre cultural y económicamente, hay menos certezas de las que en algún momento hubieron antes y mucha más multiplicidad. Así que las personas están intentando inventarse a sí mismos, y hacerlo de manera permanente".
Con frecuencia, continúa, las personas que sienten que les falta una dimensión espiritual en la vida occidental contemporánea pueden sentirse atraídas por los símbolos espirituales de culturas tradicionales de todo el mundo, los que con frecuencia son "entendidos ingenuamente en términos de espiritualidad".
El enfoque cristiano hacia los tatuajes
El declive del cristianismo en Occidente también ha tenido un grado de influencia en el surgimiento del tatuaje. Algunas corrientes del cristianismo han condenado el arte corporal debido a la percepción sobre la santidad del cuerpo. Pero esto está lejos de ser universal.
Durante el Renacimiento, por ejemplo, los devotos europeos que hacían peregrinajes a Tierra Santa a menudo se hacían tatuajes de símbolos o escenas cristianas para conmemorar la experiencia. La familia Razzouk hizo la mayoría de estos tatuajes en la antigua ciudad de Jerusalén (actualmente, los miembros de esa familia aún siguen prestando el servicio).
Pero sea cual sea tu tipo de tatuaje, las investigaciones han demostrado que alteran profundamente la forma en que te percibirán. Se ha demostrado que los adultos con tatuajes son más activos sexualmente, se involucran en comportamientos más riesgosos, tienen una mayor autoestima y se sienten cómodos con sus cuerpos; aunque esto se redujo drásticamente en las mujeres tres semanas después del tatuaje.
Por otra parte, los estudios académicos sobre la primera impresión que dan las personas con tatuajes han revelado que se espera que hayan tenido más compañeros sexuales, que sean menos inhibidos, y que probablemente sean amantes de las emociones fuertes.
Si los tatuajes son la causa o el efecto de tales tipos de personalidad es un punto discutible. Pero una cosa es cierta: dado que la fragmentación y diversificación de la vida moderna no muestra señales de disminuirlos, el arte corporal estará aquí para quedarse.

BAJADO  DE   http://cnnespanol.cnn.com/2014/09/23/tinta-con-significado-lo-que-podemos-aprender-de-los-tatuajes-de-nuestros-ancestros/

viernes, 19 de septiembre de 2014

martes, 26 de agosto de 2014

La Libertad: Chan Chan dejaría de ser Patrimonio Cultural de la Humanidad

La Libertad: Chan Chan dejaría de ser Patrimonio Cultural de la Humanidad

Domingo 24 de agosto del 2014 | 23:19

Monumento ha sido invadido por 200 personas y volquetes arrojan desmonte en sus terrenos, denunció Henry Gayoso, director del complejo arqueológico.

Chan Chan dejaría de ser Patrimonio Cultural de la Humanidad. (USI)
Chan Chan dejaría de ser Patrimonio Cultural de la Humanidad. (USI)

El director del complejo arqueológico Chan Chan, Henry Gayoso, reconoció que “sí existe peligro de que el recinto Chimú pierda el título de Patrimonio Cultural de la Humanidad” que la Unesco le otorgó.
Dijo que en noviembre llegará a Trujillo una misión de esa entidad para supervisar el monumento que ha sido invadido por 200 personas. Agregó que volquetes también están arrojando desmonte

BAJADO DE http://peru21.pe/actualidad/libertad-chan-chan-trujillo-patrimonio-cultural-humanidad-unesco-2196600?href=cat1pos2